hablar
Hace tiempo que me siento triste, con algunos momentos que me hacen sonreir. Pero lo reconozco, me estoy haciendo alguien triste, me imagino que como todos los ciclos, ahora me ha tocado uno menos alegre. No puedo decir que esté mal, porque la tristeza es cuestión de asimilarla.
Llevo ya sin tenerla conmigo, mesa con mesa, dos meses. No puedo evitar estar triste; me pregunto porque me toca siempre despegarme de la gente que quiero, de la gente que dá energía. Estoy sin ella, y estoy sorda, me falta. Voy a visitarla, me tomo un café con ella, y ella solamente me dá achuchones, besos, y me dice, “cuanto te quiero”, pregunta por mi a los de mi alrededor para ver como lo llevo yo. Me imagino que ella también me echa de menos a mi, pero yo me siento torpe, ineficaz, totalmente sobrepasada por las circunstancias. Y.. bueno, no sé encontrar tranquilidad.
Me he apuntado a clases de yoga, como el año pasado, intentando buscar esa paz que necesito; la profe dice... dejar afuera los zapatos, y con ellos todo lo de fuera, vamos a centrarnos en nuestro mundo interior.
Para mi es imposible, no puedo, y esa sensación de que te han ganado la partida, de que te has rendido, de que has decidido que no eres libre, sino estas presa a miles de circunstancias, hace que el gris sea el color de estos dias.
5 comentarios
fuzzy -
dragonfly -
Y si, creo que la tristeza y la alegría van por ciclos, unas veces toca ir cuesta arriba y otras cuesta abajo.
muchos besos y
fuzzy -
julio -
Es que cuando alguien por quien puedo tener una cierta simpatía o aprecio, como es tu caso, me dice que está triste..., pues me deja una mala sensación a la altura del estómago.
Y por otra parte también entiendo, porque lo he vivido en mis propias carnes, que todo es según el color del cristal... porque yo he mirado a través de distintos colores, y cuando lo estás viendo de una determinada forma, no crees que haya otra forma de verlo.
Pero mi experiencia es que sí, que se puede cambiar de cristal. ¿Qué hace falta? No lo se, tal vez un poco de confianza o de fe o de estar atentos a lo que nos pueda decir nuestro corazón que tal vez nos esté diciendo: ¡por ahí, por ahí...!
En fin, que te deseo lo mejor
Otro beso
julio -
Si pudiera enviarte alguna carta marcada... :)
Un beso