torre de cristal

Acabo de leer “Un millón de luces”, de Clara Sánchez, de la cual había leído también “Últimas noticias del paraíso”.
Me ha gustado, quizás todo lo que “comparo” con mi centro de trabajo, y justamente el término “torre de cristal”, le vá que ni pintado; tantas vidas, tantas historias en paredes de cristal; nos pasamos más tiempo en el trabajo que en nuestras casas; con nuestros compañeros, cada uno con sus historias; no obstante, el libro es, dinámico, y con historias animadas, y curiosas.
El personaje que quizás más me ha calado, además de la "protagonista", es Sebastian Trenas.
En las oficinas, desde la entrada, hasta los despachos, se mueven sentimientos, sensaciones, historias, tanto profesionales como personales.
¿Qué terreno ocupa más en nuestra mente?

6 comentarios

[fuzzy - 04 de marzo de 2004 - 23:24]

Por eso, hay que echarle imaginación, y que el día a día en el trabajo, desde los "buenos días", hasta el "hasta mañana", sea alegre, con una sonrisa, haciendo más humano el día a día. :)

[Juskdon - 04 de marzo de 2004 - 14:11]

Torres de Cristal, es una analogía curiosa y bastante acertada... Nos roba (creo que diría yo) mas tiempo el trabajo sin duda.Es como estar en la rueda de un hamster... :)

[fuzzy - 04 de marzo de 2004 - 09:07]

No merece las gracias.
Leo tu blog y me impresiona mucho, aunque en ocasiones no lo comento, pero el dibujo de los sentimientos que haces me llega.
un saludo.

[gino - 03 de marzo de 2004 - 19:17]

Torres de cristal, todo transparente, todo translúcido y apenas levantamos la mirada, para ver al de al lado y decir "¿qué hubo?.
NOTA: muchísima gracias por incluirme como enlace en tu blog, ya estás en el mio.

[fuzzy - 03 de marzo de 2004 - 18:08]

Estoy deacuerdo contigo, lo importante es la calidad. Pero también es bueno que el lugar de trabajo sea agradable, por el tiempo que estás allí. :)

[Ana - 03 de marzo de 2004 - 17:46]

Uff, es difícil, el trabajo ocupa muchas horas y esas horas pesan, pero yo creo que no hay que darle demasiadas vueltas al tiempo que tenemos para estar en casa, para la familia. Yo pienso que no es una cuestión de cantidad, sino de calidad. ;)